Cada paso dado cuenta parte de una historia. Cada lágrima derramada verás que de nada sirvió. Verás que sigues tu camino y todo eso queda en el olvido. Vive tu camino sin depender de otras personas. Preocúpate por los que se lo merezcan y haz la vista gorda con aquellos que sólo busquen herirte. Nadie te va a querer más de lo que te vayas a querer tú a ti misma. Nadie va a dejar todo por ti, que los cuentos de hadas se quedan en eso, en un puñado de hojas con portada de Walt Disney.
Quiere y déjate querer pero por nada del mundo dejes que nadie pueda controlar tu camino, excepto tú; que ese alguien no no será quien sufra las consecuencias y tal vez no esté ahí para ayudarte a superarlas. La gente viene y va, no lo olvides.
Sonríe hasta que consigas contagiar al mundo y sé feliz para que el mundo quiera ser feliz contigo.
Que la vida son dos días y los quiero para mí.
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