#Detrás de las cortinas

Hoy, decidida nuevamente a ir superando con amor, respeto y autoaceptación mis limitaciones, vuelco en estas líneas un poquito más de mí para intentar que, en el mañana, caminar se torne más ligero.

Hace un tiempo eliminé una publicación en la que mostraba una de las terrazas del piso en el que vivo.  Pensé quesque veía demasiado cochambrosa. He pensado muchas veces que la gente me juzgará y me etiquetará de [...] por su apariencia. Sin saber cómo me la encontré y lo mucho que yo cuido este espacio. Necesito que eso se valore a mi favor , qué insegura yo. Una vez más el dichoso "qué dirán". Aterricé aquí hace poco más de un año y desde entonces este ha sido mi aeropuerto particular. Punto de partida y también de retorno para muchos de mis viajes personales. Me he permitido volar mucho desde aquí. En este rinconcito me han encontrado muchas de mis facetas y muchas de mis inquietudes. Niña, adulta, mujer, ama de casa, hija, hermana, nieta, trabajadora fuera de casa, madre, tía, amiga... Todas ellas observándome siempre. A veces aceptándome con amor, a veces mostrándome indiferencia y otras veces rechazándome con rabia. Es aquí donde me he reconocido y también donde me he negado. Me pongo a prueba muchos días ocupando este espacio. Aquí soy visible para mucha gente. Gente que desde sus ventanas, todas por encima de mí, ve y mira. Si me paro a pensarlo, esto me asusta. ¿Qué ven, qué miran? Dichoso qué dirán... Cuando llegué aquí nadie sabía de mí. Con el paso de los días, he interactuado con algunas de esas personas desde la terraza. Siempre que salgo se me disparan las inseguridades. Antes más que ahora. Aquí me expongo claramente y a veces siento que no hay otra opción que la conversación. Parece una asignatura obligatoria. Con el paso de los días me he dejado ser. A veces evito el contacto con la gente y otras veces accedo gustosamente a él. A veces no soporto estar tan expuesta y poco después de salir, vuelvo a esconderme en mi intimidad más secreta, esa que se genera detrás  de las cortinas.