domingo, 10 de enero de 2016

# Mil sonrisas efímeras.

Desde que nuestra pompa de cristal se rompió he sonreído entre mil bocas. Quería esta libertad que en tantas ocasiones he añorado pero cada noche se repite la misma historia. Cada noche ruego en silencio el mismo deseo a distintos cuerpos: ¡quiéreme! A ti te pedía libertad cuando lo único que sabías era amarme y ahora que soy libre le pido a todo aquel que no sabe amar, que lo haga. ¿Qué es lo que me ha pasado contigo? ¿Qué es lo que me está pasando conmigo misma? Me pierdo en mí misma y cada día un poquito más. Es verdad que sabía que no sería fácil pero suponía que me reencontraría con mi esencia. A lo mejor debo darme cuenta de que soy esto?, ¿un alma pretendiendo libertad pero mendigando amor cada vez que se presenta la ocasión? No quiero ser esto.

He sonreído entre mil bocas desde que lo nuestro se quebró pero ninguna se ha quedado para volverme a hacer reir.

Tirada en la cama preguntándome hacia dónde pretendo ir, recuerdo las veces en las que me hacías cosquillas para verme sonreir. Tantas veces te echo tanto de menos... o... ¿tantas veces echo tanto de menos los momentos que me regalabas...? Han pasado ya casi tres meses y todavía no he encontrado la respuesta a esta pregunta, todavía sigo sin emcontrarme. Pero mientras tanto, sigo sonriemdo entre mil bocas, mientras tanto voy aspirando los restos de amor simulado que voy coleccionando para calmar mi ansia de besos y caricias, mis ansias de te quieros. Mientras tanto, beso mil sonrisas efímeras.


No hay comentarios:

Publicar un comentario